Dos destinos llenos de música- Crónica

Este fin de semana ha sido una montaña rusa en Madrid y más para los que amamos la música. En un lado de Madrid teníamos el primer destino: El Jardín de las Delicias, el festival que anuncia el comienzo de las clases en Madrid. En el otro lado llegaba a la capital la primera edición de Brava Madrid, un safe space que te invitaba a ser lo que quisieras ser. Con dos carteles de ensueño nosotros nos dividimos entre ambos destinos y pudimos conseguir algunos de los momentos más épicos de nuestros artistas favoritos.

El primero de los destinos: Jardín de las Delicias

Comenzamos hablando del primero de los destinos. Si tengo que describir este festival diría que es como entrar en un mundo paralelo. Como si entraras en el País de las Maravillas. La decoración, los bailarines, el recinto en sí y como no el personal disfrazado te trasladaba a otro mundo. Si hay algo que además amamos es que sea ecofriendly y que nada más llegar nos dieron un abanico con semillas que podías plantar en una maceta. Por otro lado, que no haya plástico me parece un puntazo, ya que personalmente odio como la gente deja los recintos al terminar un concierto.

¿Qué decir del cartel? Si te gusta el rock pop español este es tu festival: Dani Fernández, Melendi, Taburete, Vetusta Morla o Sidecars. Estao eran algunos de los platos fuertes del festival. La gente se volvía loca una y otra vez con esos temas que todos hemos cantado sin parar. Destacar también que el espacio era muy amplio lo que era de agradecer, ya que había muchísima gente y en ningún momento se llegó a sentir el agobio. El sonido era bueno, todas las actuaciones fueron puntuales. Se nota que el festival ya no es principiante y que está hecho de manera que tengas la mejor experiencia.

La organización fue increíble en todo momento al igual que la puntualidad. Además tenías todo tipo de comida: desde Burger King hasta Taco Bell. Por otro lado, destacar las distintas actividades como la colaboración con Dyson para hacerte tu peinado ¿lo malo? La cola interminable.

El segundo de los destinos: Brava Madrid

Seguimos con el segundo de nuestros destinos. Brava Madrid celebraba su primera edición y yo, tan pronto vi el cartel supe que no podía faltar. Para ser la primera edición debo decir que quedé gratamente sorprendida y lo disfruté mucho. En este caso no había una decoración espectacular pero ¿quién la quería? cuando lo más bonito era el dresscode de los asistentes. Como dijimos en el artículo anterior el primer día la gente se vestía de rosa y el segundo los conjuntos estaban inspirados en los 2000 (yo también me uní a seguir el dresscode). La gente lucía increíble en un espacio donde no importara cómo fueras ni quién fueras eras bienvenido. Un festival que celebra el Orgullo por todo lo alto.

Debo decir que todos los cantantes del escenario principal estuvieron a la altura, salvo para mi gusto la ganadora de Eurovisión: Loreen. La dos veces ganadora, actuó poco tiempo como bien mencionaba el horario pero dio un show bastante monótono. A pesar de su indiscutible técnica vocal no hizo mucho más que eso, cantar. Obviamente después de ver varias actuaciones de la artista sueca nos esperábamos un gran espectáculo, pero no fue así. Además, su actuación duró 10 minutos menos de lo previsto, algo que se notó ya que su concierto ya era corto de por sí. Todo lo contrario de Mika quien el viernes nos dio un show épico lleno de energía y vitalidad que bien lo caracterizan. Pero, en general todas las actuaciones fueron excelentes donde cabe destacar la increíble actuación de Natasha Bedingfield quien a mi parecer su directo es mejor que en estudio.

Por otro lado el festival tenía 3 escenarios así como varias actividades como maquillaje a los asistentes, un tarot, un desfile precioso y el Drag Brunch. Además entre cada actuación sonaban temas icónicos de Britney Spears, Rihanna, Lady Gaga y hasta de Hannah Montana.

Lo malo de Brava

Ahora bien, aunque yo soy una amante de este tipo de festival y de su música si hubo unos cuantos aspectos negativos. En cuanto al transporte y las pulseras cashless, no puedo hablar acerca de ello ya que nosotros no usamos ninguno de los dos servicios. Ha habido asistentes que han comentado que no han disfrutado de un buen concierto debido a la mala calidad de sonido. Nosotros estamos en primera fila y en nuestro caso pudimos escuchar bien todas las actuaciones.

El primer punto negativo fue el retraso de la apertura de puertas el viernes. Se formó una cola inmensa ya que se tardaron en abrir las puertas. Este hecho ocasionó que mucha gente tuviera que esperar un rato largo fuera del recinto. Además, justo a una hora, el sol era abrasador. Aunque es un punto negativo, al ser la primera edición es comprensible que se pueda experimentar problemas de este tipo.

Otro punto que quiero destacar es en cuanto a prensa. Ambos días fui una de las pocas asistentes que fue como prensa debido a la ausencia de foso para hacer fotografías. Comprendo perfectamente que fue decisión nuestra ir pero, no creo que esto sea justo. La dificultad para realizar buenas fotografías fue bastante notable. Al estar en primera fila cerca del artista había muchos fanáticos saltando y bailando. Es más, ellos mismos se brindaron a ayudarnos y se apartaban o nos dejaban un hueco para poder hacer una buena toma. Creo que esto no debería pasar. Algo a añadir es que sí se le dejó un pasillo a los VIP donde se encontraban algunos influencers lo que dificultaba aún más poder tomar buenas fotografías. Creo que esto es un aspecto que se debería cambiar en la siguiente edición porque tanto los asistentes, como influencers o artistas estaban muy receptivos a ser grabados. Haber elegido no tener un espacio para los fotógrafos ha provocado que muchos medios no hayan querido asistir.

Jardín de las Delicias y Brava Madrid resumidos en fotografías

A continuación os dejamos algunas de las fotos que pudimos tomar en ambos destinos. Las fotos del Jardín de las Delicias son de Sebastián León y las de Brava Madrid de Emma Brea.